Las playas de Cantabria contarán este verano con diez banderas azules, lo que supone un descenso significativo en comparación con años anteriores. El galardón de calidad, que se otorga a las playas por sus servicios y calidad medioambiental, ha sido retirado de algunas playas debido a varios motivos.
- Arnuero: El Sable de Quejo y La Arena.
- Castro-Urdiales: Brazomar, Oriñón y Ostende.
- Noja: Ris y Trengandín.
- San Vicente de la Barquera: Sable de Merón.
- Suances: El Sable de Tagle y Los Locos.
Disminución respecto a temporadas anteriores
La comunidad perdió varias banderas en diferentes municipios, lo que ha causado inquietud entre los residentes locales. Las banderas azules, que simbolizan el cumplimiento de estrictos estándares de calidad, seguridad y medio ambiente, son un distintivo importante para los destinos turísticos.
Playas afectadas
Entre las playas que este año no lucirán la bandera azul destacan algunas que tradicionalmente habían mantenido este distintivo. Las autoridades regionales están trabajando para identificar los factores que han provocado esta pérdida y para restaurar la calidad de las playas afectadas.
Importancia de las banderas azules
La obtención de una bandera azul es un reconocimiento internacional que ayuda a atraer a turistas. Este año, sin embargo, la disminución en el número de banderas azules plantea nuevos desafíos para Cantabria en su objetivo de mantener su reputación como destino turístico costero de calidad.
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